Preocupada con la sostenibilidad de sus negocios y con el impacto ambiental de sus actividades, Braskem, mayor productora de resinas termoplásticas de las Américas, suma grandes inversiones en la gestión de agua en sus unidades industriales. Desde su fundación, en 2002, hasta el año pasado, la compañía ya aportó cerca de R$ 280 millones en proyectos para mejora de la eficiencia hídrica. Como resultado, alcanzó un récord en su historia con un índice de 1,11m³/t en la generación de efluentes líquidos, lo que representa una mejora acumulada del 41 % desde 2002, además de una economía de R$ 115 millones con tratamiento de efluentes.

El esfuerzo de todas las áreas y sus integrantes ya generó a la empresa una economía superior a R$ 175 millones. El valor incluye reducción de costos con tratamiento de efluentes líquidos y consumo de agua, además de importantes ganancias ambientales para el ambiente de la empresa y toda la cadena del plástico.

En 2016, el índice de consumo de agua alcanzó 3,93m³/t, registrando una mejora del 5 % desde el 2002. El índice es 6,5 veces inferior al promedio de la industria química mundial, de acuerdo con datos del ICCA (International Council of Chemical Associations) - 25,64m³/t (2013).

A partir de 2011, el rehúso de agua se reveló como otra práctica sustentable y exitosa dentro de las operaciones de Braskem. En el período, la reutilización del agua de lluvia, efluente industrial y alcantarillado doméstico tratados mejoró 27 %. Solamente desde el 2014 al 2016, la compañía reutilizó 25 millones de m³ de agua por medio del Proyecto Aquapolo. La iniciativa liberó el consumo de agua potable para la región de Grande ABC, en São Paulo, en un volumen equivalente a 10 mil piscinas olímpicas.

Las diversas acciones de Braskem en el área de sostenibilidad generaron reconocimiento del mercado y llevaron a la empresa a posiciones de liderazgo en grupos y movimientos en defensa del agua, con impactos nacionales e internacionales. 

Desde 2015, la compañía integra el Pacto Global y lidera, en conjunto con SANASA, un movimiento contra el desperdicio de agua en la distribución, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sustentable definidos por la ONU. La pérdida de agua tratada contabiliza pérdidas de hasta R$ 8 mil millones por año en Brasil. En 2016, Braskem también pasó a movilizar toda su cadena de proveedores en la plataforma de CDP Supply Chain Água. La iniciativa fue un paso más para la empresa, que ya brindaba informaciones a los inversionistas sobre los riesgos hídricos y gestión estratégica del agua por medio del CDP Water. 

Adicionalmente, Braskem busca desarrollar nuevos productos, aplicaciones y soluciones que contribuyan para la mejora de la eficiencia en el uso del agua en los sectores de la agricultura y saneamiento.

Sobre Braskem
Braskem es la mayor productora de resinas termoplásticas de las Américas, con un volumen anual superior a 20 millones de toneladas, incluyendo la producción de otros productos químicos y petroquímicos básicos, y con una facturación anual de R$ 54 mil millones. Con el propósito de mejorar la vida de las personas, creando las soluciones sustentables de la química y del plástico, Braskem actúa en más de 70 países, cuenta con 8 mil integrantes y opera 41 unidades industriales, localizadas en Brasil, EUA, Alemania y México, esta última en sociedad con la empresa mexicana Idesa.