Emprender no es tarea fácil. Los desafíos son grandes y exigen mucha dedicación y persistencia para planear un nuevo negocio. En tiempos de incertidumbres económicas, como la actual recesión en el Brasil, las dificultades para el emprendedor se vuelven aún mayores y más peligrosas. La restricción de las inversiones, la baja demanda, la caída de ingresos y el aumento de pérdidas son factores de riesgo comunes en un escenario de crisis y que, si son mal evaluados, pueden llevar el sueño del emprendimiento al fin. 

En este escenario, además de la realización de un buen plan de negocios - que considere datos de mercado, previsión de gastos e ingresos, oportunidades comerciales, relación con el cliente y comunicación - el emprendedor puede garantizar mejores resultados al invertir tiempo y dinero en innovación. El tema no es un privilegio de las grandes empresas y es un recurso fundamental para el éxito de los nuevos negocios. 

Muchas veces, es más que la inversión financiera, la innovación exige una nueva actitud de la empresa para cambiar, crear y mejorar. Una alteración de procesos, un nuevo producto o servicio en el mercado, una atención más eficiente al cliente, en fin, nuevas acciones, cuando son bien aplicadas, son capaces de transformar los resultados y la cultura de una organización - ¿Y por qué no de toda la sociedad? 

En los últimos años, Braskem tuvo la oportunidad de conocer y apoyar algunos emprendedores brasileños, desafiándolos a llevar la innovación fuera de los límites de sus empresas. Son negocios en ascenso que, a partir de una idea innovadora, solucionaron una carencia del mercado y, principalmente, pueden generar un impacto positivo en la sociedad. 

Desde 2015, 31 emprendedores ya participaron de Braskem Labs, programa de incentivo al emprendimiento social y ambiental, con enfoque en soluciones relacionadas a química y al plástico. En 2016, durante cerca de cuatro meses, los participantes recibieron tutorías con ejecutivos de Braskem y de Endeavor, organización global y sin fines de lucro para promover el emprendimiento, para discutir sus estrategias, desarrollar productos y ampliar la dimensión de sus negocios. Los diversos encuentros con personas de diferentes perfiles e ideas establecen un rico intercambio de experiencias y comprueban la afinidad entre los proyectos de los nuevos emprendedores y los propósitos de Braskem. 

El emprendimiento es uno de los principales canales para que la innovación esté cada vez más arraigada en la cultura empresarial. Iniciativas como Braskem Labs son importantes para ayudar a estos emprendedores a viabilizar sus proyectos y nos ayudan a entender que solo existe sentido en innovar cuando hay el deseo de mejorar la vida de las personas. En momentos de crisis o estabilidad, uno de los principales desafíos en los negocios será siempre innovar para crecer.

Patrick Teyssonneyre es director de Innovación y Tecnología de Braskem